*Soñó con ella y despertó con la piel en llamas. Ahora la tentación trabaja a un paso de distancia*
Lara Salvatierra dedica las madrugadas a rastrear brechas de seguridad en Karalis Solutions. La compañía del CEO más brillante y escurridizo que jamás ha conocido: Nikos Karalis, un dios griego con talento para la ironía y alergia crónica al compromiso.
Ella respeta a rajatabla cada protocolo. Él improvisa hasta con el pulso.
Una mañana cualquiera en la oficina, Lara escucha la voz de Nikos al otro lado de una puerta entornada.
—No puedo sacarla de la cabeza. El sueño fue tan vívido que tuve que ducharme con agua fría.
Cuando oye su nombre enredado en aquella confesión, la taza se le escurre de los dedos. Porque de la boca de su jefe jamás había salido su nombre mezclado con deseo. Sólo bromas, encargos y ese templado «Bien hecho, Salvatierra».
Ahora, Lara sabe que Nikos lleva su piel grabada en la memoria y no sabe cómo actuar, y, al parecer, él tampoco.
Lo que está en juego:
Entre aeropuertos, discusiones a medianoche y una habitación con una sola cama, Lara descubrirá que el verdadero peligro no está en las brechas de seguridad, sino en un hombre que lleva años huyendo del compromiso… hasta que soñó con ella.